Los lectores de La Ventana dicen...

"Quiero compartir algo que me pasaron al face y me pareció muy interesante con lo cual concuerdo en un 100 %.

Voy a colgar acá una reflexión y quiero aclarar que es mi opinión. No es un debate, no quiero que me comentes lo equivocado o acertado que estoy ni armar una batalla campal. Si no te gusta, bueno, ya sabrás que hacer.

Siento que tengo que pedir perdón por querer que un candidato que no es kirchnerista gobierne el país. Siento que quieren hacerme sentir que le estoy fallando a Argentina, que si no es kirchnerista no puede gobernarnos.

Estoy caliente, durante 12 años tuve que tolerar, que por no pensar igual, me patotee el mismísimo mandatario nacional de turno, primero ÉL, después ella. Como si olvidaran que están ahí porque fueron elegidos por voluntad popular, como si YO tuviera que rendir cuentas de por qué no soy militante camporista, simpatizante del kirchnerismo o kirchnerista.

No pertenezco a ningún partido político, ni ahora ni nunca antes tampoco, ni al partido justicialista ni al radical ni a la izquierda, ni al progresismo ni a nada. Debo? No puedo simplemente votar de acuerdo a mis convicciones, que justamente no están enmarcadas bajo ningún lema de ningún partido político? No puedo simplemente tener ideales y convicciones, más allá de los K, de Perón, de Alfonsín, Menem, Macri, Del Caño, etc? Tengo que ser obligadamente etiquetada como de derecha, de izquierda, de centro derecha, de neoliberal, o simplemente un indiferente? No puedo exigirle al gobernante, nacional, provincial y municipal, que cumpla con lo que dijo que iba a hacer, que cumpla con sus obligaciones y respete mis derechos? No puedo pedirle que deje de abrir una brecha ideológica, en donde si estás con ellos sos Patria y donde no, sos un cipayo, gorila, golpista, odiás a la población, te cagás en los pobres, sos un nazi, donde SOS EL OTRO por pensar diferente?

SOS EL OTRO por pensar diferente?

Yo quiero lo mismo que la mayoría, estoy seguro. Quiero poder salir de casa, sin necesidad de meterle diez llaves y trabas a la puerta, rejas en la ventana, alarma, un dogo argentino que cuide, y pagarle un señor que pasee en bicicleta chequeando que esté todo OK. Quiero poder caminar sin el miedo de que me quieran afanar, de que me arrebaten el celular de la mano o la billetera mientras hago cola para comprar o pagar algo. Quiero que dejen de asesinar personas en entraderas, en asaltos, en secuestros. Quiero que deje de morirse gente en accidentes en las rutas destrozadas, o emparchadas sobre parches de parches. Quiero que fomenten el trabajo, que generen puestos de trabajo, que la indigencia desaparezca, que los pobres sean cada vez menos. Quiero que los pibes vayan a la escuela todos los días, y que tengan educación de calidad, quiero que los profesores y los maestros sean tratados con el respeto que se merecen, que se les pague como merecen, que dejen de ser chivos expiatorios de padres ofuscados que no saben controlar a sus hijos ni de gobernantes incompetentes que los mantienen en pie de guerra, porque siempre es más fácil echarle la culpa al otro, cuando las cosas no funcionan. Quiero que los pibes repitan si no dan con el promedio general, quiero que se los amoneste si se mandan cagadas, quiero que dejen de obligar a los docentes a aprobarlos. Quiero que mis compatriotas sepan más y no que los mantengan en el umbral de la ignorancia.

Quiero poder ir al supermercado cada tres semanas sin que hayan aumentado los precios cada vez, y encima me digan que no hay inflación. Quiero que hagan lo posible por contrarrestarla. Quiero que dejen de tratarme como un boludo diciendo que con $6 por día como, cuando es lo que te sale el colectivo para ir a laburar.

"Quiero que sus simpatizantes dejen de subestimarme por votar a otra fuerza. Dejen de querer asustarme con que se va todo a la mierda. Chicos, eso lo sabemos todos y no depende de quién asuma el poder. Ya sabemos que se va todo al carajo, no me vengan a chicanear que no soy pelotudo. Pero sí depende qué van a hacer cuando todo se vaya al carajo. Ya me cansé de que me nieguen la crisis, la inflación, que la inseguridad sea una “sensación”, y que insistan con un modelo que ya caducó, que se basó en el continuo relato de un país que no existe.

Podría seguir y seguir y seguir y así con muchísimos ejemplos, pero no tengo ganas. Tampoco tengo ganas de que vos, kirchnerista con el tuje en las dos manos, me vengas a chicanear con que me preocupo por mí solo, con que vamos a volver a los 90, como si Scioli hubiese salido de un repollo kirchnerista y no de la mano de Duhalde ni del PJ. No me corras con que Macri es un facho cuando el presidenciable oficialista dijo que Videla hizo lo que tenía que hacer en su momento, y cuando Milani está ahí firme en las filas k. No me vengas a lamer la oreja diciéndome que Macri está procesado por escuchas cuando el Vicepresidente de tu fuerza tiene domicilio en un médano y más causas abiertas que Mirtha Legrand operaciones. Ni te atrevas a decirme que Lanata miente cuando votaste al impresentable misógino e irrespetuoso de Aníbal Fernández, y por no continuar con la lista de sus cualidades ni de tramoyas. No me hables de perder derechos cuando se cargaron a un fiscal, se cagaron en la constitución e hicieron de la Justicia un aparato ideológico dependiente de la Reina Madre. Y por sobre todas las cosas, no pongas en duda mi inteligencia por no ser kircherista. No leo Clarín, apenas miro tele y cuando lo hago no miro noticias, porque me amargo y porque aunque no lo creas me la paso laburando todo el día para subsistir a rajatabla todos los meses, y lo que menos quiero es sentarme a mirar tele cuando llego a mi casa, y si así lo hiciera, soy lo suficientemente grande como para que me digan a quién creerle o no. Hablo y formo opinión en base a mi realidad diaria desde hace mucho más que 12 años. Oh casualidad, mi vida adulta la viví bajo el comando de tu partido político.

No me apuntes con tu dedo, como si moralmente fueses superior a mi. Tengo que pedirte perdón por no creerle una sola palabra a Cristina ni a ninguno de su equipo? No me voy a disculpar por festejar el ballotage, por reírme de felicidad porque ganó Vidal en mi provincia. No me voy a hacer cargo tampoco de todas las cosas que tengas ganas de decirme, una vez más, por no pensar como vos.

A partir de ahora y hasta el 22 de noviembre, momento en el que OJALÁ pueda emitir mi sufragio voy a mantenerme en silencio, festejaré si hay que festejar, me lamentaré una vez más si es que tu candidato gana, y seguiré laburando con la misma convicción que tengo ahora y que siempre tuve: al gobernante no se le agradece por haber hecho su laburo, porque para algo fue convocado para hacerlo. Y no le rindo culto a nadie, menos que menos a una señora enferma por poder, corrupta y cizañera. La Patria es Argentina, soy yo, mis vecinos, mis amigos, mi familia, vos, todos. Que no te hagan creer que somos enemigos.

Viva la Patria! "

Anónimo en la entrada "¿Volverán a "equivocarse" o en esta ocasión trabaj..."