Final de la Copa del Mundo 2014: Un italiano para dirigir y 13 Jefes de Estado presentes

Al partido Alemania vs. Argentina han confirmado su asistencia la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff (que entregará la Copa al capitán del equipo triunfador junto con el presidente de la FIFA, Joseph Blatter) y los jefes de Estado de otros 12 países: Alemania, Holanda, Rusia, Sudáfrica, República Democrática del Congo, Gabón, Haití, Hungría, Finlandia, Barbados, Guinea Ecuatorial y Trinidad y Tobago.
La presidenta argentina, Cristina Kirchner, ha excusado su presencia por una faringitis.

Argentina jugará su 5ta. final de la Copa del Mundo: ganó 2 y perdió otras 2. De la seguridad se encargarán 26.000 policías y militares. 13 Jefes de Estado acudirán al encuentro, entre ellos Angela Merkel, Vladimir Putin y Dilma Rousseff. Será el 3er. enfrentamiento entre ambas selecciones en una final del Mundial. En 1986 Argentina venció 3-2. En 1990 ganaron los alemanes 1-0. Es la final más repetida. Argentina y Alemania se han enfrentado 7 veces en un Mundial. La última vez fue en cuartos de Sudáfrica: los alemanes ganaron 4-0. Alemania solo ha ganado 1 de sus últimas 4 finales disputadas, en 1990. Será la 10ma. final entre un equipo europeo y un sudamericano. En 7 de ellas ganó el conjunto de Sudamérica.

Gisele Bündchen soñaba que Brasil jugaría la gran final.

La supermodelo brasileña Gisele Bündchen estará triste al concentrar las miradas de millones de telespectadores. Ella, acompañada del ya exjugador del FC Barcelona, Carles Puyol, pondrá glamour a la final del Mundial trasladando el trofeo hasta el límite del terreno de juego de Maracaná en una maleta especialmente diseñada por Louis Vuitton para la ocasión.

Esa es parte de la escenografía que la Federación Internacional de Fútbol Asociado preparó con mucha anticipación para el partido final del Mundial 2014.

¿Esperaba la FIFA que se repitiera el partido final de la Copa Confederaciones, cuando se enfrentaron Brasil y España?

En cualquier caso, la FIFA esperaba a Brasil en la final y ahí está Gisele como testigo compungida porque Brasil faltará a la cita supervigilada por gente de seguridad.

Por cada 3 afortunados espectadores que asistan a la gran final en el estadio Maracaná habrá 1 policía (o soldado) vigilando.

El Ministerio de Justicia brasileño ha anunciado que 26.000 efectivos de sus diversos cuerpos policiales y el Ejército patrullarán la catedral del fútbol brasileño, sus alrededores y algunos barrios de Río de Janeiro para evitar incidentes durante el partido y, sobre todo, choques antes y después del encuentro entre los alrededor de 100.000 aficionados argentinos que se esperan en la 'cidade maravilhosa', y la crecientemente exasperada torcida brasileña.

Los habitantes cariocas asisten estoicamente desde el miércoles 09/07 a la ruidosa demostración de júbilo albiceleste: las cuadras adyacentes al Fan Fest de la FIFA en la playa de Copacabana parecen auténticamente un barrio más de Ciudad de Buenos Aires desde la víspera del Holanda-Argentina.

10.000 policías militares custodiarán el estadio durante el partido. Se trata del mayor dispositivo de seguridad de la historia del fútbol y de la de Río de Janeiro; supone, además, un hito significativo en la preparación de los Juegos Olímpicos de 2016 y el presumible blindaje de la ciudad durante ese evento.

El Comité Organizador ha contratado a 1.500 agentes de vigilancia privada para la seguridad interna de Maracaná, cuyos fallos en los dos primeros partidos del torneo (con avalanchas de aficionados argentinos y chilenos que lograron acceder al estadio sin entrada) irritaron notablemente a la FIFA y produjeron la novedad de permitir la custodia policial dentro del recinto.

En total, 100.000 agentes de policía y 50.000 miembros de las Fuerzas Armadas brasileñas han sido movilizados en la Copa del Mundo (el triple que en Sudáfrica 2010). El gasto acumulado en inversiones en seguridad para el torneo alcanza los 2.000 millones de reales (660 millones de euros), según fuentes oficiales.

Al Alemania vs. Argentina han confirmado su asistencia la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff (que entregará la Copa al capitán del equipo triunfador junto con el presidente de la FIFA, Joseph Blatter) y los jefes de Estado de otros 12 países: Alemania, Holanda, Rusia, Sudáfrica, República Democrática del Congo, Gabón, Haití, Hungría, Finlandia, Barbados, Guinea Ecuatorial y Trinidad y Tobago.

La presidenta argentina, Cristina Kirchner, ha excusado su presencia por una faringitis.

La FIFA ha reservado un número indeterminado de entradas para agentes infiltrados en el público, que informarán de “cualquier incidente” antes, durante y después del partido.

El árbitro

Nicola Rizzoli será el árbitro de la final del Mundial entre Alemania y Argentina, según lo ha confirmado la FIFA, que premia el buen torneo del árbitro italiano.

Arquitecto nacido hace 42 años en Bolonia, Rizzoli será asistido en las bandas por sus compatriotas Renato Faverani y Andrea Stefani, ambos de 44 años.

El 4to. árbitro será el ecuatoriano Carlos Vera.

Se trata del 3er. italiano que dirige una final de la Copa del Mundo de la FIFA. Antes lo hicieron Sergio Gonella en 1978 y Pierluigi Collina en 2002. Además, será el 3er. partido que Rizzoli pita a Argentina en este campeonato. Se estrenó en el duelo entre España y Holanda (1-5), y luego estuvo en el Nigeria-Argentina (2-3), así como el de cuartos de final entre Argentina y Bélgica (1-0).

Internacional desde 2007, el italiano arbitró finales de las dos principales competiciones europeas: el partido Atlético Madrid-Fulham de la Liga de Europa 2010 y el Bayern Múnich-Borussia Dortmund de la Liga de Campeones 2013.

De este modo, el español Velasco Caraballo se queda sin final, algo con lo que se había especulado en las últimas fechas pese a su controvertida actuación entre Colombia y Brasil.


Fuente: U24